El 13 de mayo de 1917, tres niños que trabajaban como pastores aseguraron haber visto a la Virgen en la llamada Cova da Iría (“cueva de Irene”, antigua santa local), situada junto a Fátima, Portugal. A partir de entonces, durante los días posteriores y hasta el13 de octubre, se reunieron en el lugar miles de personas que deseaban ser testigos de dichas apariciones, que estuvieron precedidas, según afirmaron los videntes, por la aparición de un angel durante la primavera de 1916 en la cueva "Loca de Cabeco". En el transcurso de dichos actos los tres niños afirmaron que la Virgen María les reveló tres mensajes, conocidos popularmente como los tres secretos o los tres misterios de Fátima.
Los pastorcillos eran Lucía dos Santos, Francisco Marto y Jacinta Marto, estos dos últimos declarados beatos por la Iglesia Católica.
Los niños llegaron a afirmar que la Virgen les recomendó rezar el rosario y dijeron además que depositó en Lucía los tres mensajes mencionados. Además, afirman, le pidió a Lucía que se construyera una capilla en aquel lugar. El momento culminante de las apariciones lo constituyó la Danza del Sol, fenómeno solar anunciado por la Virgen a los pastores y que tuvo lugar ante decenas de miles de testigos asombrados.
El contenido de los mensajes incluía el final de la Primera Guerra Mundial (1914-1918)
Los niños dijeron que, en los mensajes, la Virgen hizo hincapié en la importancia del rezo del rosario para la conversión de los pecadores y del mundo entero.
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